14.11.2021   |   KairosNews

Según indica este informe en su presentación, «los datos que nos entrega la segunda versión vienen a confirmar la necesidad de cambios estructurales que enfrenten las desigualdades y exclusiones que parecen acentuarse en nuestra región». El texto presenta los problemas pero también «algunas miradas optimistas respecto de algún nivel de recuperación económica».

Añade que «es evidente que, si mantenemos las actuales estructuras, continuarán profundizándose la inequidad y el descarte de personas humanas, así como también el daño en nuestra Casa Común»

«Discernir los signos de los tiempos es clave para fundar sólidamente la acción pastoral de nuestra Iglesia», sostiene . Y continúa señalando que «el conocimiento experto, junto al sentir del Pueblo de Dios en medio de las raíces de nuestras sociedades (como el expresado en el Tiempo de Escucha de la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe), son de gran utilidad para esta tarea. Ambos se complementan y dan luces para comprender la realidad y actuar en consecuencia».

En este documento encontraremos datos respecto de la magnitud de la crisis, pero al mismo tiempo la forma en que han reaccionado los Estados, evitando que el desastre fuera tres veces peor. De igual manera, advierte que el financiamiento de la ayuda a la población está aumentando el endeudamiento de nuestros pueblos. Es una señal de alerta, pues en el fondo esto significa que el costo de la pandemia será financiado con mayor pobreza.