MUJERES TRADUCTORAS EN EL SIGLO IV


Por María Gloria Ladislao. Palabras con Miel.

Conferencia dictada en las 4tas. Jornadas de la Asociación Argentina de Traductores (AATI) el 1 de octubre de 2005

La escuela bíblica para mujeres

San Jerónimo, siendo ya un reconocido maestro de las Sagradas Escrituras, llega a Roma como secretario del Papa Dámaso en el año 382.

Ya hacía algunos años que allí en Roma,  impulsado por la noble viuda Marcela, existía un fuerte movimiento religioso por el cual varias viudas y vírgenes jóvenes se habían unido a Marcela constituyendo una especie de monasterio[1].

Marcela deja la vida que llevaba como mujer de la aristocracia romana, y junto con estas otras mujeres, comienzan una vida de trabajo, oración y estudio de las Sagradas Escrituras.

Al enviudar Paula, también mujer de la nobleza y acompañada de una de sus hijas, Eustoquia, que se consagra como virgen,  se unen al estilo de vida propuesto por su amiga Marcela.

San Jerónimo se dirige todas las mañanas a la casa de Marcela en el Aventino, y allí imparte enseñanza bíblica a estas mujeres (tarea que le valió el reproche de más de un clérigo y bastantes críticas).

Marcela, como “abadesa” del monasterio, dirige las tareas de lectura y estudio que se realizan en su casa….

Ver artículo completo en Palabras con Miel

2 comentarios en “MUJERES TRADUCTORAS EN EL SIGLO IV

    • Asi es,… !

      Andreza de Paraguay ha comentado:

      «Me encanta. Las mujeres tienen un papel preponderante en todo el caminar de la Biblia… como protagonista, traductora y animadora.»

      .. y lindo y bueno que sea así !!

      Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.